Cada persona experimenta dos denticiones a lo largo de su vida. Los primeros dientes de los niños, llamados dientes temporales o dientes de leche, empiezan a salir a los 6 meses de edad aproximadamente y salen durante más o menos dos años. Un niño de dos años y medio debe tener 20 dientes, 10 superiores y 10 inferiores.

Los dientes permanentes se forman debajo de los dientes temporales. Cuando están bien formados y listos para salir, estos dientes nuevos empujan contra las raíces de los dientes de leche, haciéndolos caer. Esto sucede entre los 6 y los 12 años de edad.

Los 20 dientes permanentes reemplazan a los 20 dientes temporales. Además, 12 dientes salen detrás, los molares. Así aumenta el número de dientes de un adulto a 32.

  • Un niño de 6 años debe tener 20 dientes, aproximadamente.
  • Un niño de 8 años debe tener 24 dientes, aproximadamente.
  • Un niño de 14 años debe tener 28 dientes, aproximadamente.
  • Un adulto debe tener 32 dientes.

Hábitos de higiene dental en los niños

La salud bucodental está estrechamente relacionada con una alimentación adecuada desde el comienzo de la vida. Por eso es esencial promover buenos hábitos de higiene y de alimentación saludable desde edades tempranas en los niños a fin de evitar la aparición de caries en la dentición infantil. ¡Claro que es importante cuidar los dientes de leche! Si tu hijo empieza a ser consciente de que la prevención dental (cepillarse los dientes) es necesaria para una salud dental saludable, cuando sea adulto sus hábitos seguirán siendo los mismos y gozará de una dentadura sana.

La higiene bucal es un componente estratégico muy importante en la salud para prevenir las enfermedades más comunes en la boca. Por ello, enseñando a niños y niñas buenos hábitos de limpieza, les proporcionamos beneficios para toda la vida. La familia tiene un rol fundamental en el desarrollo de los hábitos alimentarios en los niños y niñas, a través de la educación que pueda entregar como a través del modelo de alimentación, es decir qué compran, cómo cocinan y cómo comen.

La salud bucal es parte de la salud general, por lo que influye en el bienestar físico, se relaciona con la autoestima, la comunicación y las relaciones sociales. Por esta razón, es importante cuidarla desde los primeros años de vida creando en los niños y niñas buenos hábitos.

Para cuidar la salud bucal y prevenir la formación de caries, la inflamación de las encías que se llama gingivitis y las anomalías en los dientes y huesos que soportan los dientes, debemos enseñar a los niños; buenos hábitos de higiene bucal, buenos hábitos de alimentación y evitar algunos hábitos nocivos como chuparse el dedo o comerse la uñas.