¿Qué es la Actitud?, ¿La has experimentado?, ¿Eres consciente de ella?. Muchas preguntas.

Déjame decirte primero que nada que la actitud es la forma o manera en que afrontas los sucesos de tu día a día, la manera en que actúas y respondes ante ellos. Estamos de acuerdo que durante el día estás expuesto a que te sucedan tanto cosas “buenas” como “malas”, sin embargo la Actitud es lo que determina si la consecuencia o el impacto del suceso sea de mayor o menor grado. Por ejemplo, si alguien tiene un percance vial mañana, puede ser que si tiene una Actitud negativa, se cierre a un diálogo o una negociación, y que no escuche los beneficios que pudiera tener si accede a ese diálogo, si es que los hay, porque a final de cuentas, el suceso ya está hecho; y, tal vez, tenga a la postre que esperar más tiempo en una reparación que le lleve a gastar más dinero; en cambio si tiene una Actitud positiva, que esté abierto a escuchar y al diálogo, una actitud tolerante, y de respeto, seguramente podrá llegar a un acuerdo beneficioso para ambas partes. Éste es sólo un ejemplo, y sí, todo mundo experimentamos la Actitud y sus cambios día con día, en casi todo momento pero, lamentablemente no siempre estamos consientes de ella.

Por ésto es la importancia de la Actitud, mira, hay ocasiones en que nos levantamos, mal dicho “de malas”, y sí, desde ahí está mal quien piensa y dice eso, y no es de extrañarse que todo el día le sucedan cosa negativas o que mejor dicho a todo lo vea en su lado negativo, o que peor aún, lo use como justificación de sus actos de mal humor, descortesía, ingratitud etc,…que pudiera tener en ese día hacia los demás.

Si lo que pensamos y decimos, “atraemos” y, posteriormente “manifestamos”, imagínate qué pasa cuando te levantas de malas y dices o decretas que te va a ir mal ese día, ¿No preferirías cambiar esa sensación con unas palabras mágicas similares a: “Este día me va a ir de maravilla”? o con tus propias palabras, aunque de momento no lo sientas, es tu elección, la elección de que actitud vas a tomar al comenzar el día porque eso va a determinar en gran medida cómo te vas a sentir y cómo te va a ir. Claro que puede cambiar el estado de ánimo y la actitud durante el día, como te comento de acuerdo a los sucesos, pero hay que estar atentos y elegir. Hay personas que de un momento a otro se pusieron de “malas”, y ni siquiera saben porque, o bueno, al menos consientemente, y ahí es donde se puede hacer una pausa y checarnos a nosotros mismos, ¿que pasó?, si un evento que aparentemente no le di importancia me molestó, o si fue un pensamiento o un recuerdo que me irrita y me lastima; si es así, ¿para qué elegir estarlo recordando y que me amargue el día?.

La actitud también te acerca o aleja de tus objetivos o metas. ¿Has escuchado que a alguien lo despiden de su trabajo por su “actitud”?, o seguramente has visto que a personas las ascienden rápidamente gracias a su buena actitud y capacidad de resolver los problemas de una empresa, ¿ves?. ¿Tú que eliges?

Ya para terminar, te voy a contar una breve historia:

Resulta que un día un señor tiene un “mal” día en su trabajo, sale y llega a su casa enfurecido y de malas y comienza a gritarle a su esposa porque no le gusto la comida, la señora a su vez se pone de “malas” y comienza a regañar con total intolerancia a su hijo ante la menor equivocación cuando estaba haciendo su tarea y se va a dormir sin cenar. Al día siguiente el niño se levanta de “malas” y se desquita pegandole a un niño de su salón, por lo que se va expulsado y mandan llamar a su padre. Como ves es una cadena que se contagia o un círculo vicioso. Si tienes una actitud negativa y agredes, recibirás lo mismo; si decides cortar la cadena e ignorar las agresiones y lejos de eso tener un buen detalle hacia esa persona, verás que, como por arte de magia cambiaras su actitud.

Dos consejos finales:

  • Aléjate delas personas con mala actitud si crees que no puedes ayudarles, porque te pueden contagiar.
  • La mejor manera de contagiar una buena actitud es con el ejemplo, de ahí que los líderes tengan tantos seguidores, porque proyectan y promueven la seguridad y la solución de problemas.