La diarrea es una alteración en el movimiento característico del intestino con un incremento en el contenido de agua, cantidad o frecuencia de las evacuaciones. Esta se va a manifestar como una disminución de la consistencia: líquida o blanda y un incremento de la frecuencia de los movimientos intestinales igual o mayor a tres evacuaciones en un día.
La causa mas frecuente de diarrea en los niños son las infecciones por virus, aunque también pueden ser ocasionadas por bacterias o parásitos y frecuentemente se puede asociar con síntomas como náuseas, vómito y dolor (cólico) abdominal.
En los niños pequeños suelen crear preocupación familiar, aunque la mayoría de los casos son procesos leves, que se pueden controlar bien en casa.
La principal complicación que tu niño puede presentar cuando tiene diarrea es deshidratación, ya que en cada evacuación pierde una cantidad importante de agua y electrolitos; por lo que es muy importante conocer los siguientes datos de deshidratación:
- Boca seca o pegajosa.
- Ausencia o escasez de lágrimas al llorar.
- Ojos hundidos.
- Fontanela (“mollera”) hundida.
- No orinar o no mojar los pañales durante 6 a 8 horas en un bebé o un niño pequeño (o hacer solo una cantidad muy reducida de orina de color amarillo oscuro).
- No orinar durante 12 horas en un niño mayor (o hacer solo una cantidad muy reducida de orina de color amarillo oscuro).
- Piel seca y fría.
- Somnolencia o irritabilidad.
- Fatiga o mareos.
Para prevenir la deshidratación de tu niño cuando tiene diarrea, es bueno ofrecer suero oral y evitar bebidas como refrescos, jugos procesados y bebidas hidratantes. Si tu niño aún se alimenta con leche de mamá, esta NO DEBE SUSPENDERSE POR NINGÚN MOTIVO.
La duración de una diarrea aguda suele ser de unos días a una semana y no existe un tratamiento especifico para ella, por lo que no se deben administrar medicamentos para “cortar la diarrea” sin que tu niño haya sido valorado previamente por tu PediaHero de confianza.
Si tu niño tiene diarrea y:
- Tiene algún dato de deshidratación.
- Está vomitando y no puede retener los líquidos que le has dado.
- Presenta más de 8 veces en las últimas 8 horas.
- Tiene fiebre por más de 3 días.
- Observas sangre o moco en las evacuaciones.
- Lo notas distinto a como el actúa o se ve muy enfermo.
Comunicate lo más pronto posible con tu pedia mas cercano para que sea evaluado y reciba el tratamiento que tu niño necesita.
