Es una sustancia que se fabrica a partir de toxina botulínica que posee el efecto para producir parálisis muscular se aprovecha desde el punto de vista clínico para tratar ciertas enfermedades neurológicas que cursan con una hiperactividad muscular. La primera aplicación clínica de la infiltración local de toxina botulínica se realizó en 1977 como tratamiento corrector del estrabismo. Desde entonces, su uso se ha extendido no solo en el ámbito médico sino que hoy en día se considera uno de los tratamientos que ofrece mejores resultados para eliminar las arrugas. Tras su infiltración con una aguja extra fina en el músculo debajo de la piel de la zona que se desea tratar, la Toxina Botulínica Tipo A es inyectada y actúa directamente en el músculo formador de la arruga de expresión, relajándolo y consecuentemente atenuando las líneas de expresión”.

Con este efecto se pretende que desaparezcan las arrugas y por tanto proporcionar un aspecto más juvenil en la piel y un aspecto de rejuvenecimiento sorprendente. Tiene una duración temporal: el efecto ronda sobre los 6 meses; lapso después del cual debe renovarse la dosis. El tratamiento con Botox es un tratamiento con resultados predecibles, rápidos y duraderos, a la larga económicos porque muchos de los otros productos que se ofrecen en el mercado son caros y se requiere de una disciplina del paciente, para la aplicación del producto y generalmente este tratamiento es abandonado por falta de resultados, tiempo o por olvido.

  • Tiempo de aplicación: 15 minutos
  • Tiempo de duración: 6 meses
  • Resultados: Muy buenos