La historia del chocolate, como la de todos los alimentos, es paralela a la historia de las civilizaciones. Por esto es preciso antes que nada hacer una pequeña pincelada del origen de este producto. Siglos atrás entre las civilizaciones mayas (600 A.C) y aztecas (1400 A.C.) los guerreros consideraban que el cacao era un poderoso reconstituyente muy útil para las largas travesías y las duras batallas. Lo preparaban mezclando el fruto machacado con sangre.

Era tanto el valor de este fruto que también era utilizado como moneda de cambio. El cacao simbolizaba para los mayas vigor físico y longevidad. Lo usaban como medicina siendo recetado por sus médicos como relajante, estimulante y vigorizante. La manteca del cacao se usaba como pomada para curar heridas.

La cultura del cacao continuó extendiéndose según los flujos migratorios pero el consumo de la bebida quedó como un privilegio reservado para las clases superiores, para las élites y para los soldados en el curso de las batallas.

Existen muchos documentos que relatan historias sobre la evolución del cacao y sus usos en la sociedad, pero los datos históricos más interesantes los encontramos a partir del siglo XVI hasta el siglo XIX durante el descubrimiento, el comercio y la expansión del cacao en Europa. Por ejemplo, un dato interesante es que en el siglo XVIII, Carl von Linne denominó al fruto del cacao Theobroma cacao (actual nombre científico para referir-se al árbol que da el fruto del cacao) que significa “el alimento de los Dioses”.

Hoy día el cacao es considerado un alimento muy interesante:

  • Por su composición nutricional: Nutricionalmente es rico en hidratos de carbono, ácidos grasos saturados y mono insaturados, calcio, vitamina B2, fibra, magnesio, fósforo y potasio. En menos cantidad también contiene cinc, sodio, vitamina B3, B6, B9, B12, vitamina E, yodo, hierro y vitamina C.
  • Por ser la materia prima para la elaboración del chocolate en todas sus múltiples variantes: El chocolate negro se considera un potente antioxidante que ayuda a prevenir el envejecimiento del organismo, incluso el envejecimiento neuronal. Entre sus nutrientes destaca la vitamina E, algunas vitaminas del grupo B y minerales como el potasio, el calcio, el hierro y el magnesio.
  • El cacao es un alimento que pertenece al grupo de frutas tropicales.

Tratamiento del cacao para elaborar el chocolate

Los arboles del cacao tardan unos 4 años en dar sus primeros frutos. Cada flor del árbol da un fruto de forma alargada que contiene las semillas. Estas semillas son las que se tratan para uso alimentario, es lo que llamamos “cacao”.

Una vez cortados los granos se someten a un proceso de fermentación y secado. Este proceso requiere mucha mano de obra. Las semillas se dejan a la sombra envueltas con hojas de plátano y con suficiente humedad, así se produce la fermentación.

Durante el tiempo que se produce la fermentación se desprenden del grano del cacao los mucílagos y se forman en el interior las sustancias precursoras del sabor y del aroma del futuro chocolate. También se inician otras reacciones bioquímicas responsables del sabor amargo del cacao.

Posteriormente los campesinos someten las semillas a un proceso de secado que puede durar entre tres y seis días; se ponen las semillas al sol para reducir la humedad.

Una vez fermentado y seco se empaqueta para ser transportado a la industria donde será tratado para su molienda. Allí primero hay que limpiar, tostar y descascarillar las semillas. El objetivo es que el grano quede limpio de impurezas y sin cascaras, listo para mezclarse con otros ingredientes para la elaboración del chocolate.

Usos del chocolate y del cacao en polvo

El primero y más obvio es el uso gastronómico, ya que podemos degustar este alimento en múltiples preparaciones, en distintas texturas y temperaturas o mezclado con otros ingredientes. De esta manera se disfruta de su sabor y de sus propiedades. Por ejemplo: chocolate en tableta, chocolate a la taza, helados de chocolate, cremas de chocolate, pasteles de chocolate…

También el uso del cacao se ha extendido en el mundo de la cosmética. Dadas las propiedades antioxidantes del chocolate, su uso en centros de belleza se ha popularizado por sus increíbles resultados sobre la piel.

Consumo

También deberíamos tener en cuenta que es un alimento calórico y normalmente con un alto contenido en azúcares, sobretodo el chocolate con leche o los que están elaborados con muy poco cacao. Una tableta de unos 30 gramos al día en personas sanas no supone ningún riesgo, tanto si el chocolate es más o menos puro en cacao, pero en el caso de diabetes o problemas de obesidad se aconseja un consumo prudente y moderado.

Los nutrientes del chocolate varían en función de:

  • % de cacao: los chocolates que contienen alto porcentaje en cacao son más aconsejables a nivel nutricional para personas con problemas de sobrepeso. Aun así con precaución.
  • % de leche y o leche en polvo
  • % manteca de cacao
  • % de azúcar
  • % alimentos que se puedan añadir como las avellanas, las almendras, pistachos…

La naturaleza nos vuelve a obsequiar con un alimento que el hombre ha sabido sacar mucho partido, disfrutemos de él sabiendo lo que comemos.