Una de las formas más fáciles para cambiar de look es optar por un nuevo color de cabello, sin embargo, el tono elegido no siempre es el adecuado para la imagen. Es muy importante tomar en cuenta que la coloración se debe adaptar a la personalidad, al color de piel y hasta a la edad de cada mujer.

Aunque el color del cabello no tienen que estar directamente relacionado con la edad, siempre se debe pensar en ese detalle, porque un tono inadecuado puede dar un aspecto más demacrado y uno correcto puede producir el efecto contrario.

“El color equivocado puede acentuar las señales, marcas de expresión y manchas en la piel. Existen tonos de rubio que suavizan e iluminan el rostro asegurando un aspecto juvenil, ya que disimulan las imperfecciones de la piel”, explicó el estilista Glecciano Luz.

Descubre cuál es el rubio más adecuado para tu grupo de edad.

A los veinte puedes probar de todo

Entre los veinte y treinta años todo está permitido. “Las personas más jóvenes se ven hermosas con colores suaves, pero pueden arriesgarse con cualquier tono sin miedo”, aseguró la estilista Ana Paula Nesi.

El truco está en mantener las hebras lo más naturales posible. La elección de los tonos de reflejos de un color rubio medio puede variar entre oro y caramelo. Mientras que un rubio más claro o platinado también es una buena opción, siempre y cuando no se vea vulgar, ni muy pesado.

A los treinta los reflejos dorados son ideales

Generalmente en el día a día estamos a las carreras, por lo que es esencial elegir un color que nos brinde un aspecto juvenil y que no requiera mucho tiempo su adopción y manutención.

Para las mujeres de entre treinta y cuarenta años los reflejos en tonos ceniza o dorado son una buena opción, pues requieren menos retoques. “Las hebras en estos tonos se ven muy bien a cualquier edad, y son perfectas para dar movimiento y volumen al cabello”, agregó el estilista de Espacio Glecciano Luz.

Apuesta por reflejos alrededor del rostro después de los cuarenta

Lucir un tono parejo en el cabello tiende a envejecer la apariencia. “Todas las rubias suelen usar matices, hebras dos tonos por encima del natural, lo que da profundidad al color”, explica la estilista de Studio Beauty Sonia Nesi.

A partir de los cuarenta años menos es más. Para obtener un resultado natural con reflejos alrededor del rostro y disimular el cabello gris, unas luces en diversos tonos de rubio claro, como champagne o platinado, son ideales.

A los cincuenta debes cuidar más tu melena

Después de los cincuentas años, las canas son cada vez más frecuentes, por lo que los reflejos ya no son suficientes para camuflarlas. Es por ello que en ese momento es necesario darle color al cabello desde la raíz, pero sin renunciar a los reflejos poniendo especial atención en ellos.

Las mujeres mayores tienen el cabello más frágil, si la decoloración te reseca el cabello, el problema será más grave. Por eso debes invertir en más cuidados, como hidrataciones frecuentes.