¿Cómo se elige los tapices para muebles antiguos acolchados? Esta es la pregunta que a menudo hacen mis aprendices.

El buen restaurador de muebles antiguos debe tener varios concimientos, no debe sólo conocer los muebles y saber cómo restaurarlos correctamente sino que también debe conocer el mármol, el fierro, el vidrio y todos los elementos y materiales que compone el mobiliario, includendo los tapices.

Cuando restauramos un mueble, en efecto, no siempre el tapiz original se puede recuperar y a menudo ha sido ya substituido en las restauraciones anteriores. Y si a esto agregamos que para restaurar bien una silla a menudo la tenemos de desarmar para volverla a encolar, quitar el tapiz es inevitabile.

Cada época ha tenido un gusto, un estilo y un tapiz. Me encantan los tapices y he ayudado siempre a mis clientes a elegir el tapiz más adecuado para la silla o para el sillón que se colocará en un contexto más amplio, en el ambiente de la casa.

He aquí algunos factores que debemos tener presente cuando elegimos un tapiz:

  • la época del mueble;
  • los colores del ambiente donde se colocará;
  • el gusto del cliente.

Una silla Biedermeier necesitará el clásico tapiz a rayas decorado con pequeñas flores que estaba de moda en esa época. Un sillón de la segunda mitad del 800 tiene que llevar un terciopelo, una silla en estilo del siglo XVII será con cuero antiguo o un tapiz adapto.

Los colores del ambiente en el cual se colocará el mueble nos ayudarán a elegir entre una paleta de colores sin crear contrastes y creando armonia con el alrededor.

Por último, pero no por esto menos importante: el gusto del cliente jugará un rol importante en la elección del tapiz. El tapiz debe ser de su agrado, y a veces la elección que ellos hace hacen dan resultados de gran impacto decorativo como aquella vez que hemos acolchado un sillón Imperio con eco-piel blanca.