Nuestro ritmo de vida nos impide en ocasiones centrarnos en nosotros mismos. No nos cuidamos lo suficiente o al menos, no reflexionamos si lo hacemos y la vertiginosidad del trabajo nos lleva de lado a lado sin percatarnos de si bebemos suficiente agua, si hemos hecho todo el ejercicio que deberíamos o si tomamos la fruta y la verdura necesaria.

Todo eso repercute a nuestro sistema inmune o lo que es lo mismo, a la barrera protectora de nuestro cuerpo contra enfermedades, infecciones y ataques externos. Sin darnos cuenta, es posible que nos estemos haciendo un flaco favor.

Por ello, os planteamos una serie de preguntas para que determinéis si estáis cuidando de vosotros mismos lo suficiente y si vuestro sistema inmunológico está todo lo sano y fuerte que debería.

¿Estás en tu peso?

A nadie le hace falta desfilar en una pasarela de moda, por lo que no hablamos de estar delgados de forma extremada, sino que según nuestra edad y altura tengamos un peso sano y adecuado.

Estar más allá de nuestro peso ideal es peligroso para nuestra salud y nos pone en riesgo de sufrir enfermedades coronarias, colesterol o diabetes, entre muchas otras. Además, si tenemos sobrepeso es probable que sea por comer mal y no hacer deporte, algo que perjudica mucho al sistema inmune.

¿Bebes alcohol?

A nadie le pasa nada por tomar una cerveza a la semana, pero no nos referimos a eso. Preguntamos si quizás cada día al almorzar, después comiendo, a media tarde y por la noche sueles tomar cerveza, vino o una copa. Y si luego el fin de semana sigues con el mismo ritmo e incluso lo aumentas… Malo. Es probable que tu cuerpo esté sufriendo un proceso de inmunodeficiencia, ya que el alcohol inhibe al sistema inmune, que tengas problemas de sueño y tengas tus hormonas afectadas, así como mayor riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares.

¿Te drogas?

Si consumes cualquier tipo de droga, pero sobre todo si se trata de drogas duras, debes saber que tu cuerpo tiene más tendencia a sufrir problemas cardiovasculares, asma e infecciones o enfermedades debido a que las drogas tienen un efecto inmunodepresor muy peligroso.

¿Cuánto café tomas al día?

Tomar un café al día no es malo. El problema es confesarse que somos una cafetera andante y que tomamos más de cuatro cafés al día. El café causa deshidratación y mina el sistema inmunológico.

¿Fumas?

El tabaco debilita el sistema inmune y provoca mayor riesgo de padecer enfermedades respiratorias y de corazón e interfiere en los niveles de oxígeno que llega a cada parte de nuestro cuerpo.

¿Haces deporte?

Es evidente que el ejercicio tiene un efecto magnífico en nuestro sistema inmune y si no hacemos al menos tres horas de deporte a la semana, le estamos haciendo un flaco favor.

¿Estás vacunado?

¿Cuando eras pequeño recibiste todas las vacunas pertinentes? Eso mantendrá tu sistema inmune a salvo de ataques que podrían desencadenar una infección o una enfermedad grave de la que las personas que no han recibido estas vacunas sí podrían sufrir.

¿Cuántas veces te constipas al año?

Los resfriados son un buen termómetro de la salud de nuestro sistema inmunológico. Si nos resfriamos a menudo, puede ser una señal de que tenemos un sistema inmune un tanto debilitado y debemos ponernos manos a la obra para remediarlo.

¿Tomas medicamentos de forma habitual?

Hay medicamentos que son inmunodepresores o que pueden tener efectos secundarios importantes que agraven nuestra salud. Debemos tenerlo en cuenta.

¿Cuántas horas duermes?

Por todos es sabido que el sueño es una pieza fundamental para construir un sistema inmunológico sano, por lo que si no dormimos horas suficientes es posible que estemos perjudicándole sin darnos cuenta.

¿Te alimentas bien?

¿Tomas fruta y verdura a diario, al menos cinco piezas? ¿Bebes al menos dos litros de agua? ¿Tomas pescado y carne por igual? ¿Tomas legumbres y semillas? ¿Alejas de tu mesa grasas, fritos y azúcares refinados? Si es así, estás ayudando a su cuerpo a tener un sistema inmune fuerte. De otra manera, ya sabes…